“La ciencia es la
expresión de una necesidad inherente al ser humano y, en todo caso, está ligada
a la función superior de su naturaleza inteligente y la capacidad de crear.”-.
René Gerónimo Favaloro
La ciencia es el arte de crear
conocimiento, y puede ser definido como la gnosis que nos permite comprender nuestra propia naturaleza, de esa manera adquiriendo la capacidad de crear; tal vez el concepto más profundo y extenso que la especie humana
ha diseñado, pues este nos ha permitido, permite y permitirá comprender el
entorno en el que vivimos y al mismo tiempo inventar objetos para nuestro
beneficio. En el día a día utilizamos varias teorías, métodos y dispositivos
científicos cuya procedencia llevaron varios años de estudios y mentes
asombrosas que la estudien, sin embargo pocos nos interesamos en saber su
procedencia y su surgir, tal vez esta sea una de las razones por la que una
gran parte de la comunidad científica hasta hoy en día se muestre egocéntrica
contra la sociedad.
Hoy en día estas mentes y teorías se
encuentran a la disposición de instituciones gubernamentales y, transformando a
estas pequeñas masas, en herramientas para la codicia, lucro, manipulación y
ambición para quienes gobiernan.
Desde hace un tiempo he estado
reflexionando e interesado por la ciencia, pero más que nada sobre el rumbo que
ha tomado la ciencia de hoy en día, puesto que en este siglo los avances
tecnológicos se han vuelto indispensables para nuestra civilización, por
supuesto no todo ha sido positivo, es por eso que debemos hacernos varias
preguntas siempre que nos encontremos con algún invento que ya lleva un buen
tiempo en nuestras vidas o recientemente ha aparecido desde ¿Quién la financia?
¿Cómo surgió aquel dispositivo?. Pero lo más importante ¿Por qué es importante
la ciencia y hacia dónde va?
Side-note: Para mis hermanos anarquistas
quisiera que con su gran voluntad lean críticamente este post, pues consideró
que el mundo que queremos, no puede existir sin una pieza tan clave como lo son
los científicos; puesto que estas personas tendrán un rol crucial para un mundo
pacífico y puramente libre. Por si os no nos hemos fijado me atrevo a decir que
en la mayor parte de los casos el perfil científico reúne virtudes esenciales
de un verdadero anarquista.
El problema de la
ciencia
El
problema de la ciencia y sus actores de hoy en día son enormes, pues van desde
grupos religiosos, antiprogresistas, ecologistas e incluso e irónicamente en la
cual muchas veces pasa por desapercibido para los científicos que trabajan para
instituciones gubernamentales, y por último, el dinero. Omitiremos el caso
religioso y a los anti-progresistas, y nos enfocaremos como su principal enemigo,
el Estado y el Dinero.
Si
bien el humano obra científicamente desde que tiene uso de razón y sentido de
identidad, no es hasta el Renacimiento en que esta toma gran relevancia en
nuestro día a día y en la historia. Si bien el proceso de maduración de esta ha
sido largo, hay muchas diferencias entre la ciencia de los tiempos del
Renacimiento y la de hoy en día; entre estas tenemos una ciencia independiente
y una ciencia dependiente, desde el plano psicológico, hoy el humano posee más
aprecio por la vida que los del humano de ayer, pero su inútil deseo de algo
tan abstracto como “el poder”, a veces nulifica dicho aprecio, pues esta ha
corrompido la dirección de la ciencia y la están marcando más como un peligro
hacia la humanidad que como un herramienta de construcción y diseño. El estado
y la burocracia la han tomado en sus manos y la han convertido en un arma para
sus deseos y satisfacción personal.
En la antigüedad, los proyectos científicos eran mayormente independientes, es decir, sus
autores eran los únicos involucrados en su trabajo, financiándolos con sus propios bolsillos y nutriendo los planos con su
ingenio (si algo no ha cambiado por ahora es el amor y sueños que tienen los
científicos hacia su trabajo, aquello es digno de respetar), tal vez mucho de
estos nombres les parezca familiar, tenemos a los hermanos Wright y su invento:
el avión; y el asombroso Nikola Tesla y sus estudios sobre las corrientes
alternas, las ondas de radio, entre otros; como principales ejemplos de esta
época donde la ciencia era independiente. Muchos científicos e incluso artistas
interesados de estas épocas lo hacían, más que para bien personal, con la
intención de que sea útil para el bien común. Sin embargo, desde los
acontecimientos de las guerras más grandes que ha vivido el mundo,
la ciencia y sus actores se convertirían en una pieza clave para las más egoístas
e inhumanas intenciones por parte de instituciones gubernamentales como es la
militar. Muchos científicos trataron de resistirse, como es el caso de la
historia de Einstein y su trabajo que ayudo a desarrollar la bomba atómica, puesto que este evento sería la demostración perfecta para los burócratas que les dejaría en
claro la “importancia” de la ciencia para el estado y (sus intereses personales), dado el comienzo de la Guerra Fría, esta marcaría una gran cadena de inventos destinados
a unirse al sistema de la guerra.
Aunque otros casos se mantuvieron en la duda y
otros prefirieron ignorarlo, la comunidad científica finalmente tuvo que
entregar su voluntad al Estado; desde entonces la ciencia no volvería a ser
la misma, y sería direccionada hacia un camino diferente, al de los científicos
modernos e independientes, así como al sentimiento humanista.
Una máquina de guerra.
En
sí el ejemplo de Einstein sirve para introducir el principal problema de la
ciencia de hoy en día, puesto que ya no es la religión su principal obstáculo (los argumentos de estos
últimos hoy en día son menos problemáticos de lo que solían ser en la época de
la Inquisición), el conflicto radica e como la ciencia se ha vuelto un sirviente para la destrucción promovida por instituciones militares y por ende el Estado. Las batallas de hoy en día cada vez más se pelean a través de la
ciencia, más no de la habilidad del soldado como era antiguamente; la cantidad
de destrucción y muertes son mucho más grandes que las guerras medievales donde
la vida se supone era menos valorada y se confundía el honor con servicio
(aunque este último no ha cambiado mucho), y esto se debe al uso de la ciencia
por parte de las instituciones militares, pues sin tan importante herramienta
como la ciencia hoy no tendrían sus juguetes como el tanque, los aeroplanos,
las bombas, etc a tal punto que los peones que comandan se han vuelto más bien
esclavos que humanos, que sea de su conocer que muchas veces los soldados son
mandados para destruir artefactos caídos con el propósito de que el enemigo no
realice ingeniería inversa en el dispositivo averiado (la vida humana no es
valorada), pero retomemos el tema, muchas veces no nos importa lo que haga la
ciencia con respecto a instituciones militares pues igual que a estos, el estado
nos ha enseñado a rendir tributo por medio del nacionalismo, y esta primera
premisa ha llevado a algunos científicos a laborar en dichos sectores de
desarrollo; para incrementar el orgullo nacional, defender, y proteger al
Estado y así evitar que vengan otros y “usurpen lo que es suyo”, algo inválidos
para ambos bandos u otros pues ninguna nación empezó siendo grande, las
civilizaciones aparecieron a partir de la unión de varias comunidades (e
imagino que no fueron voluntarias en su mayoría), a tal punto que aquella
frasesita y el nacionalismo no son más que conceptos con poco valor, la segunda
premisa tal vez sea ad-hominen pero me es imposible ignorar y no criticarla,
¿cómo dentro de mentes tan brillantes, capaces e inteligentes pueda habitar una
idea como el nacionalismo? Un científico es primero humanista ante todo, en
palabras de Eduardo Chillida “Un humano,
cualquier humano, vale más que una bandera, cualquier bandera”. No se lo
puede decir mejor, incluso las personas más ingeniosas del siglo pasado
desarrollaban por humanidad o al menos individualidad. Los inventos por los que
hoy se trabajan son las causas de millones de muertes desde el apogeo de la
ciencia militar que comenzó después de la primera guerra mundial.
Un
tercer factor es la concepción común de que el conocimiento científico es
netamente neutro, y las consecuencias del uso de este conocimiento es
responsabilidad de otro, en palabras de Jacques Fresco “¿Cómo una persona puede decir que es científica, si tiene alineamiento
a su país, en vez de de la tierra y todo lo que habita en ella”. Sin embargo, esta concepción es un planteamiento más contemporáneo y no fue u pensamiento común antes
del término de la segunda guerra mundial; el hecho de que el estado amenacé con
un recorte de recursos financieros a un proyecto científico, ya sea para que
aceleré o cumpla con las expectativas, esto indica la dependencia de la comunidad científica al Estado
y por ende la falta de neutralidad en esta área. Caso contrario, el Estado, una
vez terminado el proyecto, se encargaría de publicar los resultados
públicamente a nivel internacional para que otros le den un uso positivo o
negativo a x estudio.
Hoy
en día la mayor parte de proyectos científicos son financiado por el Estado, las instituciones
militares Estado Unidenses invierten grandes sumas de dinero en varias
herramientas bélicas, por ejemplo en la tecnología climática, institutos como HAARP
están destinadas para evaluar la efectividad de la estratosfera (en esta se
concentra la mayor cantidad de energía electromagnética de nuestro planeta). Lo más preocupante, o mejor dicho a vergonzante de esto, no es como lo utilizan para destruir, sino como después de
dichos estudios, se le busca un uso doméstico y humano al nuevo invento, en sí dejando en claro que el motor de la ciencia, se alimenta de intereses y no de amor al conocimiento. Muchos de estos inventos los conocemos y utilizamos hoy en día como el internet, los gps, los celulares, etc. Antes, en la
época de Alfred Nobel por lo menos primero se le buscaba un uso no bélico como
lo fue la dinamita y después convertirlo en un instrumento asesino. Pero a
nosotros consumidores finales ¿Cuánto nos ha importado esto?
"La tecnología GPS utiliza satélites espaciales, los satélites militares utilizan tecnología similar para localizar objetivos alrededor del mundo |
Deberíamos
seguir el ejemplo e iniciativa de Einstein, Russell, Joliot Curie, Josef
Rosblat entre otros intelectuales donde firmaron una especie de juramento
hipocrático, comprometidos a no laborar para fines bélicos. Con la diferencia
de que esta vez es por voluntad individual. Aquello con respecto a los científicos
pero con respecto a las humanos que prefieren a dar uso al trabajo de ellos,
luchar porque la ciencia tome rienda una vez más para el beneficio de todos.
Sin embargo, la mayoría ignoramos estos hechos y muchos prefieren mantener la posición de que todo depende de quien los use. Y por como si no fuera suficiente, desprestigiamos el trabajo científico; imagino que los actores de la
ciencia quisieran recibir incentivos y ser conocidos en todo el mundo por su labor a favor la humanidad, hace mucho tiempo se los premiaba con respeto,
más no el olvido, pues la falta de esto incentiva a los científico a que mantengan en secreto su labor antes los ojos del público; otra causa es la falta de interés de empresarios que tengan ganas de
laborar por el mundo en vez de lucrarse con, muchas veces la venta de cosas repetitivas y con poca utilidad, de esa manera llevando a que la
mayor parte de científicos, se unan a las filas bélicas, pues años de estudio
no son para ir enseñando el título por la calle y no hacer nada. (así como los
militares proceden de muchas familias no pudientes, no les queda más opción que
rendir tributo a quienes les han "ayudado", el Estado).
Nuevas
tecnologías están emergiendo como lo son la robótica, la nanotecnología, la
biotecnología y ya los adictos a la
guerra y al control de las masas han puesto un ojo en ellas, es el deber de los
científicos y ciudadanos luchar para que aquellos campos con el potencial de
servir a la salud y ayuda en proyectos arquitectónicos no sean corrompidos para
destruir. Los intereses militares no deben ser el motor de la ciencia, el
bienestar y el progreso deben ser el sentimiento para el futuro.
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Esquema virtual de un nanobot futurístico cumpliendo con sus funciones en eritrocitos |
Al destituir la ciencia del poder ejecutivo, parlamentario o cualquier otro ente envuelto en su manipulación y financiamiento, podríamos hasta mejorar la educación y acelerar los trabajos científicos, la ciencia una vez más debe conquistar los ojos de cada individuo y devolver los sueños ingeniosos de crear que se encuentra en cada ser humano, esperando únicamente que los nombres de los participantes queden grabados en la historia. La ciencia
debe independizarse de las instituciones militares, y comprometerse con el
deber de ayudar a la humanidad buscando soluciones efectivas e ingeniosas a problemas globales; su
trabajo será evaluado por las personas, y sin la existencia de las fronteras
que los gobiernos exigen, el trabajo científico universal (es decir, donde
todos los científicos del mundo podrán compartir sus descubrimientos y discutir
nuevas teorías sin ningún problema), estará cada vez más cerca. Científicos es la hora de levantarse, porque si ustedes se levantan los conformistas también sentirán el golpe.
¿Cómo el Estado afecta
el trabajo científico?
Se
expuso y argumentó mayormente sobre como la ciencia afecta a toda persona y el
camino que ha tomado, pero no he presentado como el trabajo en sí se ve
obstaculizado por el Estado.
Bien,
sabemos que los proyectos científicos financiados por instituciones gubernamentales
están mayormente enfocados para fines bélicos, lo cual significa un alto
consumo de dinero que bien podrían ser utilizados para otros campos como la
salud. (ya que tocamos el tema, un recordatorio que ese dinero proviene de los
impuestos de todo “buen ciudadano”).
En
un mundo donde nos enfrentamos a conflictos como el calentamiento global, las
hambrunas, la gran demografía humana, y de tantas otras, el estado no tiene
vergüenza al enfocarse en estupideces con fines destructivos, donde los más
patéticos son aquellos países que ni siquiera se ven envueltos en un conflicto
(ej: Venezuela).Y tal vez uno de los problemas anteriormente nombrados hace
tiempo tendría una solución de no ser por este gran obstáculo y vaya que se las
han arreglado para que los ciudadanos no pidan ni aboguen por la ciencia,
tienen el poder de la educación, y distraen a sus ciudadanos con cualquier
basura de poco interés mediante los medios de comunicación u otros.
No es tampoco extremista decir que algunos burócratas se puedan estar lucrando de estas actividades ya sea la guerra o el procesamiento de sus herramientas, muchos de estos compran acciones a empresas, que pueden estar involucradas, algunos hasta dueños de una, y siendo conscientes, no se determinan a hacer algo por aquello, porque he ahí la fuente de su egoísmo, el dinero.
Es
por todo esto, que la ciencia hoy en día se ve obstaculizada y atrasada para la
creación y construcción (puesto que lo que esta acelerado es la voluntad de destruir), donde no solo las instituciones militares son las culpables, encontramos situaciones como en Estados
Unidos, donde las decisiones las toma el presidente, (ejemplos los tenemos cuando Joseph
Weizembaum denunció la administración de Bush de concentrar el 70% de recursos
financieros, en la universidad donde labora, para la guerra de Irak, y cuando
Obama firmó para detener proyectos con potencial de convertirse en realidades
transhumanistas) y esta son ordenes que no pueden ser discutidas con el pueblo. Al destituir la ciencia del poder ejecutivo, parlamentario o cualquier otro ente envuelto en su manipulación y financiamiento, podríamos hasta mejorar la educación y acelerar los trabajos científicos, la ciencia una vez más debe conquistar los ojos de cada individuo y devolver los sueños ingeniosos de crear que se encuentra en cada ser humano, esperando únicamente que los nombres de los participantes queden grabados en la historia. Después de todo quienes verdaderamente hemos sido culpables, somos los ciudadanos
por el poco interés que se demuestra en este arte, y la de la mayor parte de
científicos por trabajar para ellos, y ambos por creer en el Estado. Los últimos dos grupos tenemos la voluntad
absoluta de cambiar este hecho, y redireccionar la historia.
“La verdadera ciencia
está muy por encima de los apasionamientos políticos, de las diferencias de
raza e idioma y de los sectarismos religiosos”-. Orison Sweet Marden
¿Cómo el dinero afecta
el desarrollo de la ciencia?
“Por
el dinero se mueve el mundo” es lo que muchos dicen, y la ciencia no es una
excepción a esta reflexión crítica. No quisiera explicar mucho está parte debido a que la mayor parte de razones se encuentran en un post más antiguo
sobre “El dinero: ¿Herramienta u Objeto Inútil?”. Partiendo del punto de que los proyectos científicos, utilizan equipos sofisticados y recursos humanos con grandes capacidades intelectuales, el dinero es necesario con esta reflexión que les proveo, saquen sus propias conclusiones:
Preguntémonos,
el día que la humanidad se enfrente ante una gran crisis, por decir: hambruna,
falta de espacios donde vivir, la peor pandemia de la historia humana. ¿Se
preocupará el mundo (bueno los más humanos, porque no falta el/la que ve cómo
aprovechar cada situación) del dinero necesario para elaborar la solución a uno
de estos problemas? ¿Los científicos se limitarán a trabajar bajo
nacionalismos? ¿o se darán cuenta que más efectivo y eficiente es la unión de
grandes mentes?. Un sabio nativo americano dijo alguna vez a sus invasores
europeos, que el día que sus hijos no tengan que comer, no comerán dinero. La
referencia no fue solo para señalar la falta de ser autosuficientes, sino como
este objeto se vuelve más un obstáculo que una herramienta.
¿Por qué esto es
importante para los anarquistas?
Desde
los anarco-transhumanistas hasta los anarco-ecologistas es primordial para
nosotros, que la ciencia sea despojada de las manos del Estado, pues aquello
debilitaría considerablemente el poder del Estado; este no tendría bajo su poder la capacidad
de elaborar más herramientas para reprimir, perdería utilidad en el desarrollo
de una región partiendo del punto de que estos deben velar por el progreso, las
instituciones militares dejarán de existir con el tiempo, y en el transcurso del su
tecnología estaría desactualizada, lo que indicaría la supresión de guerras. Al
convertir la ciencia en una labor humana, el Estado cada vez necesitaría eliminar
fronteras, entre muchas otras.
Pero
lo más importante, si ello se diera, es que abriríamos paso a la elaboración de curas
para enfermedades que ya han estado viviendo junto a nosotros durante mucho
tiempo, podríamos viajar a otros planetas, y quien sabe hasta convertir
planetas inhabitables en habitables, nuevas fuentes de energías que sean
limpias, métodos más eficientes de reciclaje y mucho más. Y tal vez esto vaya muy lejos y sea arriesgado.. pero las leyes no son los únicos impedimentos en la libertad
individual, nos encontramos con la tiranía de algunos genes, podríamos comenzar a aumentar nuestras capacidades cognitivas necesarias para el trabajo diario, en el camino tal vez surjan ideas disparatadas como querer encontrar la fórmula de la inmortalidad, (después de todo lo encuentro ilógico que alguien
quiera vivir para siempre principalmente en un mundo sin dinero, donde no haya
nada que perder). Después de todo aquello no sería un problema mientras que sus actores no estén perjudicando a otro ser humano o tenga el potencial de reestablecer una sociedad jerárquica, todos debemos velar para que la ciencia no siguiese siendo corrompida.
Los problemas locales también podrían ser solucionados con
poca violencia y sin quitarle la vida a nadie (la electricidad es un buen
comienzo). Pero aun así es necesario vigilar que nadie quiera inventar dispositivos
capaces de manipular a otros. En sí, más que herir al Estado la ventaja se
encuentra en ayudar por quienes luchamos la libertad y respeto por la vida de
cada individuo en nuestra sociedad, donde cada uno es uno e importante e
indispensable para mantener la mutualidad.
En fin esto nos lleva a un pensamiento algo
Nietzcheniano, pues para lograr todo esto
es necesario que seamos anarquistas responsables, con una buena base de
principios que a veces nos lleva a hacer grandes esfuerzos, a veces a tal punto que parecerá sobrehumano.
Avancemos hacia un buen futuro como hermanos, y no dejemos que la tecnología en poder del estado nos lleven a un ambiente al estilo de muchas novelas cyberpunk.
Gracias por su lectura, los juicios y conclusiones son puramente de su persona,
es libre de hacer críticas. Hasta un próximo post. Mis hermanos Anarquistas,
Salud y Anarquía!
“La buena vida es una
vida inspirada por el amor y guiada por el conocimiento”-. Bertrand Russell
Referencias:
http://www.publishyourarticles.org/eng/articles/science-and-war-essay.html
(los que saben inglés no pierden el tiempo para leer este artículo)
http://drault.com/2006/12/29/nanotecnologia-para-la-guerra-y-la-salud/
(parece ser un blog interesante)
También quisiera hacer referencia a la revista “¡Muy Interesante!” no recuerdo
que edición… pero para quienes no saben
de sus existencia, se las recomiendo.