sábado, 4 de abril de 2015

La naturaleza no es buena... pero tampoco mala

Desde tiempos antiguos recurrir a la falacia naturalista ha sido utilizada para justificar los miedos hacia a los avances tecnológicos; las personas de mayor edad siempre alegan a que antiguamente la vida era más fácil y saludable, infiriendo que entre varios de los motivos se debe a que existía una mayor conexión con la naturaleza. Hoy en día, al igual que el pasado la ciencia se ve obstaculizado por varios grupos que intentan de ocultar su ludismo bajo ideales personales, ya sea por ignorancia o convicciones. De esa manera últimamente propaganda del tipo ¨Prefiere lo natural porque es mejor¨ se extiende a través de la redes. Sin embargo se han preguntado, si realmente ¨Todo lo natural es bueno¨, si me muerde una serpiente es muy seguro que siga diciendo lo mismo. Alguna vez se han preguntado ¿qué tan naturales somos los seres humano? A muchos les sorprendería la respuesta, puede que hasta un punto de no querer aceptar la realidad. ¿Realmente hay bondad en la naturaleza?

¿Qué caracteriza a un humano para actuar de forma amigable con el ambiente? Si me hicieran esta pregunta, lo único que nos identifica con el resto de la naturaleza a la especie humana más allá de las necesidades fisiológicas, es el instinto de supervivencia; misma virtud que nos ha llevado a distanciarnos del árbol evolutivo de otras especies y razón por la cual no actuamos bajo las leyes de la naturaleza. Al desarrollar habilidades sociales complejas, nuestra necesidad de supervivencia podría haber dado lugar a los sentimientos y necesidad de interactuar con otros de nuestra especie, la necesidad de mantener a estos individuos a nuestro lado así como progresar individualmente nos llevaron a crear comunidades y a trabajar por un interés común, permitiéndonos utilizar recursos de la naturaleza de una manera distinta a la que se arriesgan otras especies. Estas herramientas que también evolucionaron poco a poco han permitido facilitarnos y extender nuestra vida. De entre las distintas ramas de la ciencia la medicina destaca como una de las principales razones del porque actuamos, o más bien luchamos contra las leyes de la naturaleza, es bueno reflexionar para aquellos que creen que lo natural es mejor y que la búsqueda de avances científicos es un atentado contra la tan sangrada pachamama, que el trabajo de salvar una vida no es algo propio de la naturaleza, lo natural es que a partir de las condiciones en las que se encuentra un individuo determinen si vive o muere, la existencia de un individuo cuyas capacidades se ven limitadas es algo poco probable en el mundo salvaje, lo natural es que sus padres lo abandonen o asesinen, estar leyendo esta reflexión no tiene nada de natural, lo natural es que no estés leyendo esto y si quieres demostrar lo contrario, avientes la máquina por la ventana; a cada lado que mires y veas a una persona en dicho lugar es bueno recordar que si hubiera sido otra época tal vez no estuviera en aquel lugar al que miras, antiguamente era fácil morir por una gripe por ejemplo; la muerte ha sido una parte de nuestra historia, sin embargo nuestra especie no pretende aceptarla fácilmente.

Este es un problema que se viene cometiendo desde la antigüedad y que de cierta manera los grupos actuales como los "ecologistas" o las comunidades nativas (que se han desarraigado de su cultura)  no dejan morir: La personificación de la naturaleza. 

A menudo se le da virtudes humanas, se le otorga conductas que solo un humano puede interpretar y se la llega a moralizar a pesar de ser un concepto; por el simple motivo de que ha sido tal concepto como la naturaleza la que nos provee de vida, dándonos alimentos, oxígeno, herramientas y todo tipo de materiales que nos permiten llevar la vida de una manera feliz y saludable, si hay algo en lo que tienen razón tales idealistas es que la naturaleza es un escenario que debe ser cuidado, pero recordando que aquello no significa rechazar la tecnología y los productos de la ciencia, después de todo estas y sus actores son los verdaderamente amantes de la misma, ya que no aprecian únicamente la belleza superficial que la mayoría observa, pues los biólogos moleculares por ejemplo comprenden las maravillas de las reacciones bioquímicas de un organismo, los astrónomos comprenden y explican la naturaleza de los fenómenos espaciales (la naturaleza no solo esta aquí en la Tierra) , y otros van más allá tomando aquella belleza abstracta de la naturaleza para transformarla en maravillosos inventos tan simples como un foco LED hasta algo de una escala como el Colisionador de Hadrones. La naturaleza es un concepto que es mucho más complejo para una premisa tan simple como ¨el debemos protegerla¨, trasciende a la moralidad, no hay tales premisas como esto es bueno y aquello malo, es un concepto que se rige bajo una gran cantidad de leyes de las cuales el humano solo unas cuantas a podido descifrar, no posee sentimientos, no es un dios que intercede en asuntos humanos, simplemente afectan a nuestra vida así como la de otras especies a través de la manifestación de fenómenos generados por dichas leyes.

Concluyendo, no hay moralidad en la naturaleza y nosotros los humanos desde el principio de las comunidades nos enfrentamos a ella día a día motivados por lo que un inicio fue nuestro instinto de supervivencia hasta agregarse la curiosidad de explicar y comprender sus fenómenos, con el fin de obtener beneficios de ella. No estamos fuera de la naturaleza, simplemente tratamos de personificarla y verla expresarla desde una perspectiva humana y aquello es un paradigma, un muro que debe ser destruido.

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